El 9 de octubre es el día para todos los amantes de la tauromaquia.
El Día Mundial de la Tauromaquia.
Por fin el merecido y esperado reconocimiento a los cirujanos taurinos va a ser una realidad. De la mano de Tauroemoción Espectáculos Taurinos tendrán lugar el día 22 de febrero en el Palacio de Vistalegre. Festival taurino con picadores. El cartel está aún por confirmar. Enhorabuena por la iniciativa.
Ultimamente me ronda la cabeza un tema de terminología taurómaca. Y creo que puede ser un argumento en defensa de la fiesta brava, algo más que podriamos usar para esgrimir contra los ataques ignorantes.
Aqui va mi argumento:
En la Fiesta Brava no se mata. En la fiesta brava se sacrifica. De acuerdo con lo que he investigado y estudiado (sin ser experto) acerca de La Fiesta de los toros; “la suerte de matar” debería ser renombrada como “la suerte de sacrificar” “El acto del sacrificio”. Cambiar la palabra ‘matar’ por la palabra ‘sacrificar’ .
¿Por qué?
El origen de La fiesta de los toros en España es borroso, hay algunas pruebas de que en el siglo XII ya se practicaba. Sin embargo, la tradición Española es consecuencia de orígenes aun más remotos. La antigua Grecia
La lidia de toros esta relacionada con festividades religiosas. Patronímicos y Fiestas de Santos que eran el marco festivo donde la Fiesta de los toros era la recreación popular y como toda fiesta religiosa de la antiguedad se sacrificaban animales, (como sigue siendo en nuestros días en algunas religiones).
Una hecatombe (sacrificio de 100 toros en las fiestas de culto a Zeus en la antigua Grecia)
Haaj . El ritual del sacrificio musulman donde se sacrifican corderos, cabras, carneros, reses y hasta camellos y que se practica en todo el mundo Islamico hoy en día.
Las fiesta de San Fermin, la fiesta de San Isidro, San Marcos, etcétera son rituales para honrar al santo de la comunidad, donde se sacrificaba un animal en su honor, en este caso un toro. Solo que en lugar de sacrificarlo simplemente, en determinado momento decidieron que un hombre debería combatir contra la bestia, darle la oportunidad de defenderse y ‘matarlo’ culminando asi el sacrificio que puede ser por partida doble, pues el hombre se arriesga de tal manera que nos ilustra que su vida y la profesión de torero implican un sacrificio verdadero.
El torero se lanza a dar una estocada certera que puede terminar en un autosacrificio.
Saludos cordiales: José Luis Barros
Muy cierto e interesante lo que dices, José Luís.